MAÑANA

¡Solamente esfuérzate y sé valiente!

      El SEÑOR es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré? El SEÑOR es la fortaleza de mi vida; ¿de quién me he de atemorizar? — Da fuerzas al cansado y le aumenta el poder al que no tiene vigor. Los muchachos se fatigan y se cansan; los jóvenes tropiezan y caen. Pero los que esperan en el SEÑOR renovarán sus fuerzas; levantarán las alas como águilas. Correrán y no se cansarán; caminarán y no se fatigarán. — Mi cuerpo y mi corazón desfallecen; pero la roca de mi corazón y mi porción es Dios, para siempre.  

      Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros? — El SEÑOR está conmigo; no temeré lo que me pueda hacer el hombre. — Por medio de ti embestiremos a nuestros enemigos; en tu nombre pisotearemos a los que se nos oponen. — Somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.  

      ¡Levántate y actúa! Y que el SEÑOR sea contigo.  

JOS. 1:18. Sal. 27:1. — Is. 40:29-31. — Sal. 73:26. Ro. 8:31. — Sal. 118:6. — Sal. 44:5. — Ro. 8:37. 1 Cr. 22:16.

NOCHE

Nuestro amigo . . . duerme.

      Tampoco queremos, hermanos, que ignoren acerca de los que duermen, para que no se entristezcan como los demás que no tienen esperanza. Porque si creemos que Jesús murió y resucitó, de la misma manera Dios traerá por medio de Jesús, y con él, a los que han dormido.  

      Porque si los muertos no resucitan, tampoco Cristo ha resucitado; y si Cristo no ha resucitado, la fe de ustedes es inútil; todavía están en sus pecados. En tal caso, también los que han dormido en Cristo han perecido. Pero ahora, Cristo sí ha resucitado de entre los muertos, como primicias de los que durmieron.  

     Cuando toda la gente acabó de cruzar el Jordán, el SEÑOR habló a Josué diciendo:  y mándales diciendo: “Tomen de en medio del Jordán, del lugar donde están firmes los pies de los sacerdotes, doce piedras, . . . estas piedras sirven de monumento conmemorativo a los hijos de Israel, para siempre. — ¡A este Jesús lo resucitó Dios, de lo cual todos nosotros somos testigos! — Los testigos que Dios había escogido . . . que comimos y bebimos con él después que resucitó de entre los muertos.  

JN. 11:11. 1 Ts. 4:13, 14. 1 Co. 15:16-18, 20. Jos. 4:1, 3, 7. — Hch. 2:32. — Hch. 10:41.

Publicado originalmente en inglés bajo el título Daily Light on the Daily Path por Samuel Bagster and Sons, Ltd., Londres. Salvo otra indicación, las citas bíblicas han sido tomadas de la versión Reina-Valera Actualizada 2015. © 2015, Editorial Mundo Hispano. Usada con permiso.