MAÑANA
Sé vigilante y refuerza las cosas que quedan y están a punto de morir.
     El fin de todas las cosas se ha acercado. Sean, pues, prudentes y sobrios en la oración. — Sean sobrios y velen. Su adversario, el diablo, como león rugiente anda alrededor buscando a quién devorar. — Guárdate y guarda diligentemente tu alma, no sea que te olvides de las cosas que tus ojos han visto, ni que se aparten de tu corazón durante todos los dÃas de tu vida. —El justo vivirá por fe; y si se vuelve atrás, no agradará a mi alma. Pero nosotros no somos de los que se vuelven atrás para perdición sino de los que tienen fe para la preservación del alma. Â
     Lo que a ustedes les digo, a todos les digo: ¡Velen! Â
     No temas, porque yo estoy contigo. No tengas miedo, porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré, y también te ayudaré. También te sustentaré con la diestra de mi justicia’. Porque yo, el SEÑOR, soy tu Dios que te toma fuertemente de tu mano derecha. Â