MAÑANA

Dios me ha hecho fecundo en la tierra de mi aflicción.

       Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de toda consolación, quien nos consuela en todas nuestras tribulaciones. De esta manera, con la consolación con que nosotros mismos somos consolados por Dios, también nosotros podemos consolar a los que están en cualquier tribulación. Porque de la manera que abundan a favor nuestro las aflicciones de Cristo, así abunda también nuestra consolación por el mismo Cristo.

       En esto se alegran, a pesar de que por ahora, si es necesario, estén afligidos momentáneamente por diversas pruebas, para que la prueba de su fe, más preciosa que el oro que perece, aunque sea probado con fuego, sea hallada digna de alabanza, gloria y honra en la revelación de Jesucristo. — El Señor sí estuvo conmigo y me dio fuerzas. 

       Por eso, los que sufren según la voluntad de Dios, que encomienden sus almas al fiel Creador haciendo el bien.  

GN. 41:52. 2 Co. 1:3-5. 1 P. 1:6, 7. — 2 Ti. 4:17. 1 P. 4:19.

NOCHE

El SEÑOR es quien va delante de ti. Él estará contigo; no te dejará ni te desamparará.

      Allí los impíos dejan de perturbar; allí descansan los de agotadas fuerzas. Los prisioneros están juntos en descanso y no escuchan la voz del capataz.

      ¡Bienaventurados los muertos que de aquí en adelante mueren en el Señor! . . .  descansen de sus arduos trabajos; pues sus obras les seguirán.

        Nuestro amigo Lázaro duerme . . . Jesús había dicho esto de la muerte de Lázaro, pero ellos pensaron que hablaba del reposo del sueño.  

      Los que estamos en esta tienda gemimos agobiados. — Sino también nosotros, que tenemos las primicias del Espíritu, gemimos dentro de nosotros mismos aguardando la adopción como hijos, la redención de nuestro cuerpo. Porque fuimos salvos con esperanza; pero una esperanza que se ve no es esperanza, . . .  Pero si esperamos lo que no vemos, con perseverancia lo aguardamos.  

HE. 4:9. Job 3:17, 18. Ap. 14:13. Jn. 11:11, 13. 2 Co. 5:4. — Ro. 8:23-25.

Publicado originalmente en inglés bajo el título Daily Light on the Daily Path por Samuel Bagster and Sons, Ltd., Londres. Salvo otra indicación, las citas bíblicas han sido tomadas de la versión Reina-Valera Actualizada 2015. © 2015, Editorial Mundo Hispano. Usada con permiso.