MAÑANA
Su vida está escondida con Cristo en Dios.
     Los que hemos muerto al pecado, ¿cómo viviremos todavÃa en él? — Con Cristo he sido juntamente crucificado; y ya no vivo yo sino que Cristo vive en mÃ. Lo que ahora vivo en la carne, lo vivo por la fe en el Hijo de Dios quien me amó y se entregó a sà mismo por mÃ. — Y él murió por todos para que los que viven ya no vivan más para sà sino para aquel que murió y resucitó por ellos. — Si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquà todas son hechas nuevas.     Â
     Y estamos en el verdadero, en su Hijo Jesucristo. — Como tú, oh Padre, en mà y yo en ti, que también ellos lo sean en nosotros. — Ustedes son el cuerpo de Cristo y miembros suyos individualmente. — Porque yo vivo, también ustedes vivirán. Â
     Al que venza le daré de comer del maná escondido, y le daré una piedrecita blanca y en la piedrecita un nombre nuevo escrito, que nadie conoce sino el que lo recibe. Â