MAÑANA

Hasta ahora no han entrado al reposo y a la heredad que les da el SEÑOR su Dios.

       Este no es lugar de reposo. — Por tanto, queda todavía un reposo . . .  para el pueblo de Dios. — Dentro del velo donde entró Jesús por nosotros como precursor.

        En la casa de mi Padre muchas moradas hay. De otra manera, se los hubiera dicho. Voy, pues, a preparar lugar para ustedes. Y si voy y les preparo lugar, vendré otra vez y los tomaré conmigo para que donde yo esté ustedes también estén.  — Con Cristo, lo cual es muchísimo mejor.

        Dios enjugará toda lágrima de los ojos de ellos. No habrá más muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas ya pasaron. — Allí los impíos dejan de perturbar; allí descansan los de agotadas fuerzas.
        Acumulen para ustedes tesoros en el cielo . . .  porque donde esté tu tesoro, allí también estará tu corazón. — Ocupen la mente en las cosas de arriba, no en las de la tierra.  

DT. 12:9. Mi.  2:10. — He.  4:9. — He.  6:19,  20.  Jn.  14:2,  3. —Fil.  1:23.   Ap.  21:4.—Job 3:17.  Mt.  6:20,  21.—Col.  3:2. 

NOCHE

¿Dónde está, oh muerte, tu victoria? ¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón?

        Pues el aguijón de la muerte es el pecado. — Pero ahora, él se ha presentado una vez para siempre en la consumación de los siglos para quitar el pecado mediante el sacrificio de sí mismo. Y de la manera que está establecido que los hombres mueran una sola vez, y después el juicio, así también Cristo fue ofrecido una sola vez para quitar los pecados de muchos. La segunda vez, ya sin relación con el pecado, aparecerá para salvación a los que lo esperan.   

        Por tanto, puesto que los hijos han participado de carne y sangre, de igual manera él participó también de lo mismo para destruir por medio de la muerte al que tenía el dominio sobre la muerte este es el diablo, y para librar a los que por el temor de la muerte estaban toda la vida condenados a esclavitud.  

        Porque yo ya estoy a punto de ser ofrecido en sacrificio, y el tiempo de mi partida ha llegado. He peleado la buena batalla, he acabado la carrera; he guardado la fe. Por lo demás, me está reservada la corona de justicia.

1 CO.  15:55.  I Co.  15:56. — He.  9:26-28.  He.  2:14,  15.  2 Ti.  4:6-8.

Publicado originalmente en inglés bajo el título Daily Light on the Daily Path por Samuel Bagster and Sons, Ltd., Londres. Salvo otra indicación, las citas bíblicas han sido tomadas de la versión Reina-Valera Actualizada 2015. © 2015, Editorial Mundo Hispano. Usada con permiso.