MAÑANA
El Padre es mayor que yo.
Cuando oren, digan: “Padre [nuestro que estás en los cielos. — Mi Padre y Padre de ustedes . . . mi Dios y Dios de ustedes.
Como el Padre me mandó, así hago. — Las palabras que yo les hablo, no las hablo de mí mismo sino que el Padre que mora en mí hace sus obras.
El Padre ama al Hijo y ha puesto todas las cosas en su mano. — Le diste autoridad sobre todo hombre para que dé vida eterna a todos los que le has dado.
Señor, muéstranos el Padre y nos basta. Jesús le dijo: —Tanto tiempo he estado con ustedes, Felipe, ¿y no me has conocido? El que me ha visto, ha visto al Padre. ¿Cómo, pues, dices tú: “Muéstranos el Padre”? ¿No crees que yo soy en el Padre y el Padre en mí? — Yo y el Padre uno somos. — Como el Padre me amó, también yo los he amado; permanezcan en mi amor. Si guardan mis mandamientos permanecerán en mi amor; como yo también he guardado los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor.
JN. 14:28. Lc. 11:2. — Jn. 20:17. Jn. 14:31. — Jn. 14:10. Jn. 3:35. — Jn. 17:2. Jn. 14:8-10. — Jn. 10:30. — Jn. 15:9, 10.