MAÑANA

No dejen que se hable mal de lo que para ustedes es bueno.

      Apártense de toda apariencia de mal. — Procuramos que las cosas sean honestas, no solo delante del Señor, sino también delante de los hombres. — Porque esta es la voluntad de Dios: que haciendo el bien hagan callar la ignorancia de los hombres insensatos.  

      Así que, ninguno de ustedes padezca como homicida, o ladrón, o malhechor, o por entrometerse en asuntos ajenos. Pero si alguno padece como cristiano, no se avergüence; más bien, glorifique a Dios en este nombre.  

      Ustedes fueron llamados a la libertad, hermanos; solamente que no usen la libertad como pretexto para la carnalidad. Más bien, sírvanse los unos a los otros por medio del amor. — Miren que esta su libertad no sea tropezadero para los débiles. –Cualquiera que haga tropezar a uno de estos pequeños que creen en mí, mejor le fuera que se le atara al cuello una gran piedra de molino y que se le hundiera en lo profundo del mar. — En cuanto lo hicieron a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí me lo hicieron.  

RO. 14:16. 1 Ts. 5:22. — 2 Co. 8:21. — 1 P. 2:15. 1 P. 4:15, 16. Gá. 5:13. — 1 Co. 8:9. — Mt. 18:6. — Mt. 25:40.

NOCHE

¡Despiértate, tú que duermes, y levántate de entre los muertos, y te alumbrará Cristo!.

      Ya es hora de despertarse del sueño, porque ahora la salvación está más cercana de nosotros que cuando creímos. — Por tanto, no durmamos como los demás sino vigilemos y seamos sobrios; porque los que duermen, de noche duermen; y los que se emborrachan, de noche se emborrachan. Pero nosotros que somos del día seamos sobrios, vestidos de la coraza de la fe y del amor, y con el casco de la esperanza de la salvación.  

      “¡Levántate! ¡Resplandece! Porque ha llegado tu luz, y la gloria del SEÑOR ha resplandecido sobre ti. Porque he aquí que las tinieblas cubrirán la tierra; y la oscuridad, los pueblos. Pero sobre ti resplandecerá el SEÑOR, y sobre ti será vista su gloria.  

      Por eso, con la mente preparada para actuar y siendo sobrios, pongan su esperanza completamente en la gracia que les es traída en la revelación de Jesucristo. — Estén ceñidos sus lomos y encendidas sus lámparas. Y sean ustedes semejantes a los siervos que esperan a su señor.  

EF. 5:14. Ro. 13:11. — 1 Ts. 5:6-8. Is. 60:1, 2. 1 P. 1:13. — Lc. 12:35, 36.

Publicado originalmente en inglés bajo el título Daily Light on the Daily Path por Samuel Bagster and Sons, Ltd., Londres. Salvo otra indicación, las citas bíblicas han sido tomadas de la versión Reina-Valera Actualizada 2015. © 2015, Editorial Mundo Hispano. Usada con permiso.