MAÑANA
Honra al SEÑOR con tus riquezas y con las primicias de todos tus frutos.
     El que siembra escasamente cosechará escasamente, y el que siembra con generosidad también con generosidad cosechará.  — El primer dÃa de la semana, cada uno de ustedes guarde algo en su casa, atesorando en proporción a cómo esté prosperando.
     Dios no es injusto para olvidar la obra de ustedes y el amor que han demostrado por su nombre, porque han atendido a los santos y lo siguen haciendo. Â
      Hermanos, les ruego por las misericordias de Dios que presenten sus cuerpos como sacrificio vivo, santo y agradable a Dios, que es el culto racional de ustedes. — Porque el amor de Cristo nos impulsa, considerando esto: que uno murió por todos; por consiguiente, todos murieron. Y él murió por todos para que los que viven ya no vivan más para sà sino para aquel que murió y resucitó por ellos. — Ya sea que coman o beban, o que hagan otra cosa, háganlo todo para la gloria de Dios. Â