MAÑANA

He aquí que la mano del SEÑOR no se ha acortado para salvar, ni su oído se ha ensordecido para oír.

      El día que clamé, me respondiste; mucho valor infundiste a mi alma. — Aún estaba hablando en oración, cuando Gabriel, el hombre al cual yo había visto en visión al principio, voló rápidamente y me tocó, como a la hora del sacrificio del atardecer.  

      No escondas de mí tu rostro; no apartes con ira a tu siervo. Tú has sido mi ayuda; no me dejes ni me desampares, oh Dios de mi salvación. — Pero tú, oh SEÑOR, no te alejes. Fortaleza mía, apresúrate para ayudarme.  

      ¡Oh SEÑOR Dios! He aquí que tú has hecho el cielo y la tierra con tu gran poder y con tu brazo extendido. Nada hay que sea difícil para ti. — Quien nos libró y nos libra de tan terrible muerte. Y en él hemos puesto nuestra esperanza de que aun nos librará. — ¿Y Dios no hará justicia a sus escogidos que claman a él de día y de noche? ¿Les hará esperar? Les digo que los defenderá pronto.

IS. 59:1. Sal. 138:3. — Dn. 9:21. Sal. 27:9. — Sal. 22:19. Jer. 32:17. — 2 Co. 1:10. — Lc. 18:7, 8.

NOCHE

Yo te he glorificado en la tierra.

      Mi comida es que yo haga la voluntad del que me envió y que acabe su obra. — Me es preciso hacer las obras del que me envió mientras dure el día. La noche viene cuando nadie puede trabajar.  

      ¿No sabían que en los asuntos de mi Padre me es necesario estar? Pero ellos no entendieron el dicho que les habló. — Esta enfermedad no es para muerte sino para la gloria de Dios; para que el Hijo de Dios sea glorificado por ella. ¿No te dije que si crees verás la gloria de Dios?  

       Jesús crecía en sabiduría, en estatura y en gracia para con Dios y los hombres. — Tú eres mi Hijo amado; en ti tengo complacencia. — Todos daban testimonio de él y estaban maravillados de las palabras de gracia que salían de su boca.

      ¡Digno eres . . . porque tú fuiste inmolado y con tu sangre has redimido para Dios gente nos has redimido para Dios de toda raza, lengua, pueblo y nación. Tú los has constituido en un reino y sacerdotes para nuestro Dios, y reinaremos sobre la tierra.  

JN. 17:4. Jn. 4:34. — Jn. 9:4. Lc. 2:49, 50. — Jn. 11:4, 40. Lc. 2:52. — Lc. 3:22. — Lc. 4:22. Ap. 5:9, 10.

Publicado originalmente en inglés bajo el título Daily Light on the Daily Path por Samuel Bagster and Sons, Ltd., Londres. Salvo otra indicación, las citas bíblicas han sido tomadas de la versión Reina-Valera Actualizada 2015. © 2015, Editorial Mundo Hispano. Usada con permiso.