MAÑANA

Porque en todo han sido enriquecidos en él.

      Porque, aún siendo nosotros débiles, a su tiempo Cristo murió por los impíos. — El que no eximió ni a su propio Hijo sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará gratuitamente también con él todas las cosas?  

      Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad; y ustedes están completos en él, quien es la cabeza de todo principado y autoridad.  

      Permanezcan en mí, y yo en ustedes. Como la rama no puede llevar fruto por sí sola si no permanece en la vid, así tampoco ustedes si no permanecen en mí. Yo soy la vid, ustedes las ramas. El que permanece en mí y yo en él, este lleva mucho fruto. Pero separados de mí nada pueden hacer. — El querer el bien está en mí, pero no el hacerlo. — Sin embargo, a cada uno de nosotros nos ha sido conferida la gracia conforme a la medida de la dádiva de Cristo.  

      Si permanecen en mí y mis palabras permanecen en ustedes, pidan lo que quieran y les será hecho. — La palabra de Cristo habite abundantemente en ustedes.

1 CO. 1:5. Ro. 5:6. — Ro. 8:32. Col. 2:9, 10. Jn. 15:4, 5. — Ro. 7:18. — Ef. 4:7. Jn. 15:7. — Col. 3:16.

NOCHE

Verán su rostro.

       Muéstrame por favor tu gloria. Dijo además: No podrás ver mi rostro, porque ningún hombre me verá y quedará vivo. — A Dios nadie lo ha visto jamás; el Hijo único que está en el seno del Padre, él lo ha dado a conocer.  

      Todo ojo le verá: aun los que le traspasaron. Todas las tribus de la tierra harán lamentación por él. — Lo veré, pero no ahora; lo contemplaré, pero no de cerca.  

      Yo sé que mi Redentor vive y que al final se levantará sobre el polvo. Y después que hayan deshecho esta mi piel, ¡en mi carne he de ver a Dios — En cuanto a mí, en justicia veré tu rostro; quedaré satisfecho cuando despierte a tu semejanza. — Seremos semejantes a él porque lo veremos tal como él es. — Porque el Señor mismo descenderá del cielo . . . y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros, los que vivimos y habremos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para el encuentro con el Señor en el aire; y así estaremos siempre con el Señor. 

AP. 22:4. Ex. 33:18, 20. — Jn. 1:18. Ap. 1:7. — Nm. 24:17. Job 19:25, 26. — Sal. 17:15. — 1 Jn. 3:2. — 1 Ts. 4:16, 17.

Publicado originalmente en inglés bajo el título Daily Light on the Daily Path por Samuel Bagster and Sons, Ltd., Londres. Salvo otra indicación, las citas bíblicas han sido tomadas de la versión Reina-Valera Actualizada 2015. © 2015, Editorial Mundo Hispano. Usada con permiso.