MAÑANA
ConfÃa en el SEÑOR con todo tu corazón y no te apoyes en tu propia inteligencia. Reconócelo en todos tus caminos y él enderezará tus sendas.
     Esperen en él en todo tiempo; derramen delante de él su corazón porque Dios es nuestro refugio.
     Te haré entender y te enseñaré el camino en que debes andar. Sobre ti fijaré mis ojos. No sean sin entendimiento como el caballo o como el mulo, cuya boca ha de ser frenada con rienda y freno; de otro modo, no se acercan a ti. Muchos dolores tendrá el impÃo; pero la misericordia cercará al que espera en el SEÑOR. — Entonces tus oÃdos oirán a tus espaldas estas palabras: ¡Este es el camino; anden por él, ya sea que vayan a la derecha o a la izquierda!. Â
   Y él [Moisés] respondió: Si tu presencia no ha de ir conmigo, no nos saques de aquÃ. ¿En qué, pues, se conocerá que he hallado gracia ante tus ojos, tu pueblo y yo? ¿No será en que tú vas con nosotros y en que tu pueblo y yo llegamos a ser diferentes de todos los pueblos que están sobre la faz de la tierra? Â